Y
lo digo total y completamente en serio: Este fin de semana, del que
probablemente todos tuvieron una oportunidad de descansar
-aprovechando que el viernes, todos nuestros patrones abrieron la
cartera y decidieron darnos nuestras miserias quincenales-, en
Veracruz y en Jalisco fue completamente lo contrario, pues la muerte
literalmente flota por los ríos de aquellos estados.
Primero
a lo primero: El fin de semana pasado se registró en
la Laguna de Cajititlán en Tlajomulco, Jalisco, la muerte de
toneladas de peces y otras criaturas que habitaban en dicho manto
acuifero. Esta catástrofe, contrario a lo que la SEMADET -Secretaría
de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial- y lo que las autoridades
de Tlajomulco aseguraron en primer lugar, NO FUE DESENCADENADO POR
CAUSAS NATURALES.
El
hecho tomó lugar desde la semana pasada, que cientos de peces
-conocidos como popochas- aparecieron flotando en la Laguna.
Lasprimeras investigaciones del gobierno municipal, aseguraron que se
trataba de un fenómeno natural, por falta de oxigenación en el manto
y el repentino aumento en la temperatura. Sin embargo, el hecho se
acrecentó dando lugar en la mañana del sábado 30 y el domingo 31 a
la aparición de más de 53 toneladas -si wey, 53 toneladas, es como
lo que se come de pescado en Japón en un día... bueno, no- de peces
muertos en las orillas y en la superficie de Cajititlán.
El
ayuntamiento de Tlajomulco de Zuñiga, desde el año pasado, ya ha
tenido problemas de ese estilo, siendo investigados por la PGR por
negligencia ambiental, con un suceso parecido a este, pero esto...
Simplemente ya se les fue de las manos -equisdé-.
Funcionarios
de la Procuraduría Estatal de Protección al Medio Ambiente y la
Comisión Estatal del Agua aseguran tener pruebas que incriminan la catastrofe al mal manejo de
desechos tóxicos de las plantas tratadoras de agua, los cuales son
vertidos en la Laguna. Mismo afirman granjeros, pescadores y
habitantes de la zona. Esta, aunque usted NO lo crea, es la cuarta
vez que se muestra una mortandad enorme de vida marina en lo que va
del año.
Por
otro lado, en el municipio de Tierra Blanca, en Veracruz, sucedió algo
similar: En este estado es bien conocido el trafico ilegal de
energéticos, y por la ya negligente PEMEX, esto ha cobrado más
vidas de las que se pueden contar.
Una
toma clandestina de gasolina Premium sufrió de una fuga, liberando
litros y litros del combustible en un radio de 6 km dentro del
llamado Arroyo Hondo. El incidente no sólo tomó vida marina con
animales como peces, tortugas y anguilas, sino que llegó a dañar
también vida terrestre, tomando animales como conejos, ratones e
incluso distintos tipos de aves.
El
gobierno municipal de Tierra Blanca no hizo esperar su ultra enojo e
hizo algo que muy pocos se han atrevido a hacer: Levantaron una
denuncia a nivel FEDERAL en contra de PEMEX, asegurando que, de haber
detectado la toma clandestina, la fuga pudo haber sido evitada o
incluso, de llevarse, pudo haberse liberado en el arroyo un líquido
que aísla el combustible, evitando el aún no cuantificado genocidio
ecológico.
La
opinión general de Sinismo De Verdad es que es increíblemente
ridículo que lo poco que tiene el país esté cayendo por las pocas
empresas que, literalmente, se comen México. Mismo ocurre con el
“fracking” y el posible desastre ecológico que está intentando
ser prevenido en Cuatro Cienegas.
Pensándolo detenidamente, los políticos y empresarios que bailan con la música
del noticiero en las mañanas son aquellos que causan esto. Pero yo
les advierto, bola de pendejos, el día en que los peces caminen
fuera del agua y puedan llevar cuchillos y pistolas en sus aletas,
dorsales, créanme... Ustedes serán los primeros. Así que recen por
que la teoría de Darwin no sea cierta.
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