Por:
Mimo Infernal
Ha
pasado ya un largo rato desde que el mundo entero fue sacudido en
miedo, en confusión, enfermedad. Trece largos años en que una de
las potencias mundiales más grandes y más poderosas sufrió una
herida tan grande cuya cicatriz aún se puede notar en el terror y en
los cambios que este hecho libró en los habitantes de este hermoso
país... JAJAJAJAJAJAJA.
El
martes 11 de Septiembre de 2001 parecía ser un día normal para todo
Estados Unidos: Los perros ladraban, las escuelas abrieron, los
trabajadores se preparaban y salían para llegar a tiempo a sus
rutinarios trabajos y los aviones, como siempre, despegaban.
Aquel
día a las 8:00 AM, el vuelo 11 de American Airlines, un Boeing 767
despegó desde el aeropuerto Logan en Boston con destino hacia Los
Ángeles. 14 minutos más tarde, el vuelo 175 de United
Airlines,mismo modelo de avión despega desde el mismo aeropuerto en
Boston con el mismo destino en California. 19 minutos después de su
despegue, el vuelo 11 reporta una sospecha de secuestro, mientras que
a las 8:21, el vuelo 77 de American Airlines, un Boeing 757 despega
desde el aeropuerto internacional de Dules, en Washington con destino
hacia Los Angeles.
Tan
sólo 46 minutos después del despegue del vuelo 11 de American
Airlines, comienza la catástrofe: La aeronave se incrusta por
completo dentro de la Torre Norte del World Trade Center, ubicado al
de Nueva York. 18 minutos después de la catástrofe, el vuelo 175 de
United Arlines golpea a la Torre Sur causando una segunda explosión
en el lugar. Numerosos medios de comunicación, oriundos de Estados
Unidos, como distintos medios internacionales se habían concurrido
ya en esos momentos en los alrededores de la ya denominada “zona
cero” para transmitir las imágenes de la catástrofe con la poca y
confusa información que llegaba a sus manos.
El
mundo entero, ya confundido con los hechos estaba a la espera de
nueva información, pues, para muchos, Las Torres Gemelas del centro
financiero de Manhattan estaban erguidas ya como un símbolo del
poderío político y económico que Estados Unidos se había forjado
ya, y para los estadounidenses, era como un símbolo de lo que su
esfuerzo como americanos había resultado. Las explosiones causadas
por el impacto de los aviones que cargaban cada uno 91mil litros de
combustible, eran un horrendo espectáculo para videoaficionados y
versiones que atónitos observaban la escena.
Durante
las 9:00 de la mañana, las notificaciones al gobierno federal de los
Estados Unidos habían sido ya llevadas a cabo. El en ese entonces
presidente, George W. Bush, se encontraba en una escuela primaria en
Florida cuando le fue informado de los ataques. Su primera reacción
fue mandar un mensaje a la nación desde esa misma escuela y minutos
más tarde salir hacia una base militar ubicada en Luisiana.
A
las 9:37 AM, el tercer vuelo, el vuelo 77 de American Airlines se
estrella en El Pentágono. 10 minutos más tarde, en Washington, los
habitantes de la Casa Blanca y el Congreso de los Estados Unidos son
evacuados de los edificios, previniendo un cuarto ataque. A las 9:58
AM, una hora después del golpe a la Torre Norte, la Torre Sur
colapsa, llevándose con ella miles de vidas, personas inocentes que
acudían a este edificio para ganarse el pan. Media hora después, a
las 10:26, la segunda torre colapsó de la misma forma.
Las
explosiones desde los impáctos en las torres causaron una fuerte
columna de humo que era visible desde lugares aledaños a la isla de
Manhattan -se cuenta que se podía apreciar la escena desde Jersey-,
sin embargo, el verdadero riesgo llegó cuando ambas torres cayeron,
pues, cuando estas se derrumbaron, escombros, polvo y humo entre
otras cosas, se esparcieron en un perímetro amplio al rededor de la
zona cero.

A
la 1 de la tarde, el presidente Bush declara alerta máxima en todo
el país. Durante algunas horas la confusión dominó no sólo país,
sino al mundo entero. La primera idea de los medios sobre el ataque
habría sido disipada después de observar claramente el impacto a la
segunda torre. A las 5 de la tarde el edificio 7 de 67 pisos del
World Trade Center se derrumba también. Esa noche, el presidente
dirige un mensaje a la nación a través de la televisión.
Los
daños del ataque se pudieron observar hasta varios años después de
sucedido. La cifra de muertos alcanzó a los 2973 mientras a la
fecha, aún hay más de 20 desaparecidos. Otras de las repercusiones
que logró atentado terrorista fue el cambio a la seguridad nacional
en Estados Unidos, además de reglamentaciones más severas en los
viajes aéreos.
El
ataque para muchos significa uno de los días más oscuros de la
cultura occidental. Miles de muertes de civiles y héroes del día a
día son homenajeadas hasta la fecha. El día de hoy, el presidente
actual delos Estados Unidos, Barak Obama, acudió a la zona cero en
donde rindió homenaje a las victimas del atentado. Sin embargo, para
un servidor, el ataque y el día tienen un significado diferente.
El
día 11 de Septiembre significa para mí uno de los principales
justificantes para la hipocresía patriótica y nacionalista del país
norteamericano. Su pueblo vivió en carne propia el horror que ellos
mismos habían propiciado a distintos países al rededor del mundo a
través de décadas y distintas guerras en busca de un mayor
económico, comenzando desde la guerra fría hasta la invasión a
Iraq, en supuesta búsqueda de la célula responsable conocida como Al
Qaeda.
El
ataque permitió a los norteamericanos invadir libremente países de
medio oriente, principalmente Iraq, Iran, Israel y actualmente Liba y
Siria. Además, los atentados de 2001 crearon una xenofóbia
enfermiza que se esparció por toda la nación hacia aquellos
inmigrantes legales e ilegales que tuvieran rasgos de medio oriente o
que pertenecieran a la religión musulmana . Se dieron más de 8
casos de americanos impunes quienes dispararon a personas de medio
oriente, uno de ellos característico, pues, la víctima usaba un
turbante, característico de los Sijs, siendo confundido con un
musulmán.

En
mi humilde opinión, es muy doloroso y estúpido decir que el
sacrificio de miles de vidas, dándolas por su país es heroico -incluidas las vidas de hombres, mujeres y niños de otros países,
no sólo militares-. Es totalmente lo contrario a heroico. Estados
Unidos de América realiza cada año un homenaje a las muertes del 11
de Septiembre, muertes tanto de civiles como héroes que tuvieron el infortunio de encontrarse ahí. Una pequeña cantidad de vidas cobradas al contado por la perra del Karma. Para concluir, querido
lector, tras leer ambas partes de la historia, ¿Estaba Estados
Unidos en lo correcto al invadir Iraq después de los ataques a las
Torres Gemelas? ¿O simplemente se merecían una probada de lo que
ellos han regalado al resto del mundo?
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